24/8/15

No te echaré de menos en Septiembre...

... No te echaré de menos en Septiembre, Verano muerto veré las vías taaachaaarrr... No, tranquilos, que esto no será como una canción de los años 80.

Amigos, sin duda, éste ha sido un verano muy duro. Nunca pensé que lo diría pero, por primera vez en mucho, mucho tiempo, NO tenía ganas de escalar. Lo del calor de este verano ha superado con creces una motivación que llevaba inquebrantable durante más de diez años pero mira, al final todo llega en la vida. Y claro, en situaciones excepcionales suceden cosas imprevisibles porque lo que no es normal es que, por ejemplo, cambiemos el campo por la playa y la roca por el plafón. Pero bueno, no os asustéis, que la cabra al final siempre tira al monte. Espero que os lo hayáis pasado super bien en vacaciones y vuestas libretas estén a rebosar de encadenes veraniegos. Ya queda poco para que todo vuelva a la rutinaria normalidad pero no me vengáis ahora con lo del sídrome postvacacional que algunos aún no hemos podido experimentar lo que es hacer las maletas para irnos de viaje. Al menos de momento...

Compañeros de fatiga durante este caluroso verano
Preparados para la faena
Por abajo tiene buena pinta...
Pero es que por arriba...
Lo flipas...
L1 de Amistades peligrosas. A ver qué sale
Pues sí. No ha sido fácil pero definitivamente ya se atisba la luz al final del túnel. Tras ocho semanas de necesario refugio en el aire acondicionado del rocódromo y alguna que otra salida a roca casi obligada (por aquello del qué dirán) parece que poco a poco las temperaturas y la motivación vuelven a sus cauces habituales. Así pues y como podréis imaginar muy poco es lo que hay que contar sobre la actividad de estos últimos dos meses. Por un lado Miguel Ángel y yo ampliamos la oferta escalantil de Penya Roc. Él equipó El flasheador, línea en la que habíamos depositado todas nuestras esperanzas de encontrar una vía relajada para calentar pero que, finalmente, ha terminado siendo mucho más dura de lo deseado ya que tras hacerle la primera ascensión creo que la cosa rondará sobre 7b+. Eso sí, muy recomendable. 

Pablo estudiándose los metros finales de Columneta
Ahora me toca a mí
Comenzando el segundo largo
En donde nos encontramos las primeras hostilidades
Por mi parte rematé el segundo largo de Barón rojo y su línea vecina, bautizada como Ciática. La primera consta de dos duros pasos de bloque por lo que seguro subirá el 7c+ de su primer largo hasta aproximadamente el 8a+, similar cotación que alcanzará la susodicha Ciática, que presenta un resistente trazado en monochorrera sin ningún tipo de reposo. También comencé a equipar otra interminable ruta a la derecha de A la llum de les chorreres. Constará de tres largos y unos 40 metros de desplomado recorrido por lo que promete ser de las más duras de la pared. Como veis la faena se acumula por estos lares. 









Secuencia de imágenes del titánico pegue de Diego a Rocinante. Casi casi...
Y por lo demás deciros que Diego de Murcia ha sido fiel visitante del Cabeçó el cual fue gratamente recompensado con el encadene de Sensación de pinzar, 7c mítico de esta escuela. Ahora mismo también tiene super a punto la Rocinante donde ya ha caído dos veces en la mismísima cadena. Pero bueno, al margen de su casco, no se le puede reprochar nada ya que yo mismo fui testigo de como luchó durante más de un minuto intentando coger cuerda para poder chapar el top. Seguro que en el próximo pegue lo consigue. Y ya como último apunte decir que el propio Diego se lleva en Ricote un antiguo 7c+ old school conocido como La fisura. Por mi parte, las pocas ganas que encontré para escalar las empleé en ir ganando metros en el segundo largo de la Columneta, megaviote de 50 metros que, a buen seguro, no bajará del 8b. En octubre más y mejor (y más fresco)...